jueves, 14 de junio de 2012

¿Dieta Cosmética? - 46)



para la Fundación San Cayetano del Mar
por el Prof. Eduardo Castro

Observación Inicial:
Considerando que toda dieta que pretenda mejorar la imagen de una persona, deberá comenzar visualizando la posibilidad de incrementar su calidad de vida desde la salud, desde el “internal make up” que tiene en la nutrición sus implementos fundamentales. Por esta razón y más allá del nombre que quiera Usted darle a este manojo de ideas, creemos que estos sintéticos conceptos son bienvenidos toda vez que, necesariamente, para mejorar la imagen de una persona es siempre necesario optimizar su salud.

Dice un viejo Maestro de esta especialidad, el Lic. Odraude Ortsác: “Si en el espejo la persona observa algunos años de menos en su rostro, es porque su hígado y sus riñones entre otros órganos, y sus aportes funcionales interrelacionados sistémicamente, también observan varios años menos. Aunque… la belleza es otra cosa, clara e invariablemente, es un reflejo de la armonía espiritual natural de cada individuo, independientemente de su estado fisiológico”.

Un apunte histórico:
1) Al descender el peso una persona deja el “nivel energético que tenía” para cambiar a otro que es normalmente menor. En el anterior estado, la acumulación de energía daba lógicamente, determinados rendimientos que se percibían en lo social no siempre agraciadamente, claro, con una autosuficiencia basada en la confianza que entrega la energía disponible (o lo contrario, recluyéndose de la "estigmatización" que en ocasiones existe) y desde ya, repercutiendo en la intimidad de las personas, porque naturalmente el deseo y la disponibilidad sexual era superior en cantidad y también en calidad.

También es necesario decir que, las capacidades reflexivas, en el sentido de la introspección, la creatividad y de la concentración mental aplicada a tareas específicas, no alcanzan el vuelo (no rinden) y hasta podemos decir que observamos “cierta torpeza” en las personas que, dado su exceso de peso, manifiestan una “pseudo intoxicación residual” (una toxemia de origen ingesto alimentario), que circula en sangre y obstaculiza o promueve determinados eventos bioquímicos, desde el turn-over proteico alterado, hasta la resistencia a la insulina. Este cambio, que debe ser monitoreado por especialistas del equipo interdisciplinario, no siempre es sostenible porque el “genoma ahorrador” que abraza afectuosamente ciertos hábitos alimentarios, por la ansiedad y la “torsión” que aplican las viejas costumbres (el inicio del síndrome de abstinencia), y por otras variables que viven en nuestros ambientes obesogénicos naturales, todas ellas juntas entonces, nos inducen a regresar, ingesta mediante, a los valores volumétricos y calóricos de las comidas históricas.
Teoría de LA BARRERA REFRACTARIA
Prof. Eduardo Castro, el 10 de octubre
de 2010, en este blog.


Hipótesis I:

“La sola ausencia del pan y el azúcar en la dieta de cualquier persona, más el agregado de 28,5 ml agua por Kg por día (hasta los 105 Kg de peso), es garantía de éxito en el inicio de cualquier régimen dietoterápico de adecuación del peso.”


Hipótesis II:
“El cambio de hábitos alimentarios es mejor viabilizado en el marco de una distribución calórica transitoria del orden del 60% de HC (más del 95% complejos y de volumen alimentario), 20% de Proteínas (70% de AVB transitoriamente), y 20% de Grasas seleccionadas (con profusa presencia de Omega 9)”.


Hipótesis III:

“La NEO NUTRICIÓN tiene uno de sus pilares en la revalorización de la presencia de los MICRONUTRIENTES en el cálculo alimentario. La respuesta contundente de un plan alimentario estriba en el empleo ampliado de las Vitaminas y de los Minerales, hasta donde indiquen las RDA y más allá de estas cifras, cuando el Profesional de la Salud lo entendiese pertinente, con el objeto de obtener una rápida respuesta al plan dietoterápico”.

Observación:
Sin la presencia de los MICRONUTRIENTES en el cálculo calórico o en la estrategia dietoterápica, los resultados son a muy largo plazo y, no se sostienen en el tiempo. No existe la posibilidad del CAMBIO DE HABITO ALIMENTARIO exitoso, sin considerar la necesidad de las RDA y más aún, en algunos micronutrientes determinados.

Los MICRONUTRIENTES son al plan dietoterápico, lo que un timón a un barco, pudiendo darle a un plan determinado un rumbo “preciso y contundente”.

Es necesario y conveniente operar el “destaque” de determinados MICRONUTRIENTES en forma individual, en función de las necesidades de paciente, descartando los multivitamínicos y los multiminerales, salvo en situaciones puntuáles que autorizare el Médico Deportólogo, porque suelen atentar contra la saciedad y exacerbar necesidades fisiológicas naturales que, eventualmente, no fuesen oportunas o importantes.

Hipótesis IV:

“La vitamina E, elemento natural del “internal make up” por excelencia, entrega la mejor respuesta en materia de “optimizar la imagen del paciente” ante sí mismo. Su empleo es altamente seguro y, existen suplementos del orden de los 1000 mg, de innegable contundencia en el rápido incentivo que el paciente necesita, en general.”

Observación:
Su capacidad le permite prevenir la oxidación de importantes estructuras celulares, desde los efectos capitalizados en el tiempo hasta la oxidación espontánea, que da lugar a radicales libres que suelen combinarse con el efecto tóxico del O2, al que permite una mejor distribución y ahorro.

Visualmente, se observa una mejor textura, mayor brillo y una notable disminución en las marcas de pliegues gestuales, lo que entrega la idea de “regresión en el tiempo”, la cual y en mi opinión, tiene bastante de real. Los efectos en dosis determinadas se presentan en cuestión de horas, junto con una sensación de bienestar y un despliegue operativo posiblemente ajeno a la circunstancia usuál del paciente.

Hipótesis V:
“Los suplementos de vitaminas, minerales y aminoácidos, son un aliado en la consecución de rápidos y concretos resultados en el orden de la dietoterapia”.

Observación:
Los rápidos y los contundentes resultados, son importantes aliados en el incentivo del paciente que, generalmente, autogestiona su nueva dieta.

Hipótesis VI:
“Las dosis vitamínicas “EN AVALANCHA”, muy útiles en casos eventuales o en circunstancias particulares, deben ser en todos los casos consensuadas en el equipo interdisciplinario de salud y decididas finalmente por el médico jefe, dejando constancia fehaciente del acto, con fines formales y con destino a las estadísticas biomédicas de rigor.”


Hipótesis VII:
“Las antocianinas poseen una gran capacidad desinflamatoria que entrega rápidos y concretos resultados, en la forma de mejorar la imagen del paciente, incrementar su bienestar físico y optimizar la funcionalidad de cada persona, siendo el mejor vehículo pro absortivo, la suspensión licuada, en caldos o como bebida fría.”


Hipótesis VIII:
“La HIPER HIDRATACIÓN es una formidable herramienta en el cambio de hábitos alimentarios, los valores sugeridos son de 28,5 ml/Kg/día, hasta los 105 kg de peso, a partir del cual se mantendrá el máximo del cálculo expresado es decir sólo 3000 ml /día, siempre que el médico estuviese de acuerdo, esto sostenido durante 5 días seguidos, para luego descender a la “ingesta voluntaria de agua” por parte del paciente”.

Observación:
La teoría de la BARRERA REFRACTARIA, de octubre de 2010, enuncia que el 2,8% del peso del individuo hasta los 105 Kg, ayuda muchísimo en el descenso de peso, de la mano de diuréticos naturales tales como el “te de perejil” y otros. Visite el blog y vea este trabajo en detalle.

Hipótesis IX:
“El acido ascórbico es un excelente facilitador de la obsorción intestinal en general”.


Hipótesis X:
“El cálculo del 20% de la proteínas y su selección, será fundamental en el CAMBIO DE HABITOS ALIMENTARIOS, especialmente por su capacidad de retejido y su palatabilidad saciante”.


Hipótesis XI:
“La DIETA LÍQUIDA es un excelente patrocinador de la absorción, desde soluciones y suspensiones alimentarias”.


Hipótesis XII:
“La temperatura, de 45 a 60 grados, optimiza la ya excelente absorción de la DIETA LÍQUIDA”.

Observación:
Líquido + Temperatura = MAXIMA ABSORCIÓN (en condiciones normales).

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